Biografía
Mi nombre es Ciro del Barco (1979). De nacionalidad mexicana, transplantado tempranamente a la ciudad de Córdoba. Decidí estudiar filosofía como modo de encaminarme hacia las artes. De algún modo sentía que la filosofía y el arte no buscaban cuestiones esencialmente diferentes, sino que al final ambas se encuentran frente al misterio de la existencia. Descreía de la división rígida de disciplinas en que nos manejamos, y tal vez por eso nunca me especialicé en nada. O bien mis especializaciones terminaron siempre inconclusas, mutando. No sin sufrimiento, nunca llegué a ser actor, no me decidí a ser pintor, no pude ser músico, ni mantener la escritura; dejé de ser fotógrafo, se me escapó la filosofía, y creo que me queda poco tiempo de videojockey. Aunque tampoco dejaré, inevitablemente, de ser algo de todas estas cosas. Mucho de introspección, sin encontrar nada concreto, salvo el absurdo tiránico de la razón.
Lo que siempre perduró en mí fue la extrañeza por lo que posteriormente descifré como imagen. Siempre me fascinó el movimiento de la imagen cuando se escurre en el devenir de la conciencia, el espacio-tiempo, la multiplicidad de sentidos que anima al fantasma que atraviesa la humanidad de manera constituyente, y la necesidad de antemano imposible de desentrelazar de ese misterio. Por ello deambulé en el laberinto de espejos buscando rastros. Sentí la necesidad de experimentar con cine, pero el magnetismo del video me succionó hacia la imagen electrónica, a partir de la cual comencé a filmar y explorar diferentes tiempos, reales y diferidos.
Lo bueno del videoarte es que cualquier cosa que filmas es arte, ya que ponés el espacio-tiempo entre comillas. ¿Las comillas son el arte? Lo bueno del arte es que cualquier cosa que hagas, con sólo quererlo, es arte. Eso lo debió haber dicho Warhol, y por eso lo admiro tanto.
Actualmente trabajo con la generación y manipulación de imágenes de todo tipo, intentando sentir la textura de la imagen, del tiempo, tele-transportando (me) en él a través de extensas y efímeras sesiones nocturnas, horas en las que el video, maquina del tiempo-luz, despierta. Vorágine de la conciencia: relatos, citas, conjuros invocantes, llamada de fantasmas, vivisecciones y autopsias de momentos históricos muertos. La repetición rítmica como mantra. Rodeos para llegar a pequeños momentos.
Al momento continúo sumergido en el sueño del genio maligno que domina los sentidos. Vivo de hacer danzar marionetas de luz. O algo así…
Visión del arte
1. Elija una obra que lo/la represente, descríbala haciendo referencia a su formato y materialidad, su relación con el tiempo y el espacio, su estilo y su temática; detalle su proceso de producción
Una obra que tal vez represente algo de lo que me identifica conmigo mismo como posible artista, sea Lágrimas las del lente empañado: inesperadamente, mientras filmaba, fluyó un acto atípico, un encuentro sobrenatural, con un grupo de seres con forma de vaca que me interpelaban. A través de la cámara sentí que surgía algo performático (susceptible de entrar entre comillas), algo partícipe de lo real sin ficción, pero a su vez plenamente onírico y medio sagrado. Como en un sueño, no podía recordar cómo había llegado ahí, y la cosa se fue armando hasta que finalmente se disolvió nuevamente en la cotidianeidad. Posteriormente surgió el trabajo de reensamblar lo ocurrido, el espectro que había quedado capturado en la cinta.
Creo que mis trabajos siempre giran en torno a un sueño febril que tuve en la infancia, cargado de una inquietante extrañeza que me presentaba, de alguna manera ostensiblemente visual, algo como la insoportable inasibilidad y plena existencia de lo infinito siempre sucediendo-siempre por suceder. Una obsesión, un específico trastorno, una inconmensurabilidad desesperada. El propio yo irresoluto, trans-sustanciado en lo visto que nos mira. Siempre, o casi siempre, recurrente.
2. En líneas generales, ¿cuál sería la forma en que sugeriría leer su obra?
No estoy seguro de si hay algo en mí como un corpus al que se le pueda llamar “obra”. Más bien tengo intentos ramificados, búsquedas, bosquejos, arribos; que pueden ser leídos individualmente pero que podrían leerse en conjuntos, viendo sus vínculos, tiempos, relaciones, lugares, situaciones, recorridos, intentos. En el caso concreto y particular de mi actividad como videojokey pediría, si es posible o tiene sentido hacerlo, una lectura que contemple las vicisitudes funcionales y que, no se cómo, acceda al mundo solitario cuasi solipsísta del cual salieron infinitas y tal vez casi imperceptibles emociones.
3. En relación a su obra y su posición en el campo artístico nacional e internacional, ¿en qué tradición se reconoce? ¿Cuáles serían sus referentes contemporáneos? ¿Qué artistas le interesan de las generaciones anteriores y posteriores?
Me reconocería, con mucho trabajo para focalizar, en una tradición de autóctonos autodidactas post 70’s, post nacimiento de la tv, pre-internet.
Como referentes nombraría la multimedia de Empédocles por su concepción científico-médica multidisciplinaría y su noción práctica del espacio,y a Leonardo da Vinci también por algo de eso. A Bill Viola y a David Lynch, a Peter Greenaway y a Joel Peter Witkin por su obsesión por la materia y el cuerpo. Al sádico de Werner Herzog por su don visual, a Andy Warhol por su extrema lucidez, coherencia y honestidad; a Duchamp por su libertad para relacionar, a los locos del Di Tella por divertirse y hacer eso en Argentina, a Bob Flanagan, a Klaus Kinski por su locura incontenible, a Lewis Carroll, a John Kennedy Toole por su ironía, a Thomas Mann Y Dostoievsky, y en este momento, a D. Foster Wallace por su melancolía fría y a Benito Laren que hojeo aquí en Boladenieve.
4. Pensando en los últimos diez o quince años elija obras o muestras a su criterio fuertemente significativas de otros artistas de Argentina y explique por qué.
Hubo una muestra que me pareció fuertemente significativa en el contexto local cordobés, o más bien me hubiera gustado que lo fuera. No sé si lo fue, pero en todo caso estuvo buena: Proyecto Amarillo 1, una casa intervenida en el 2005 con propuestas inocentes y buenas intenciones.
El 11 de Setiembre de 2001 hubo una muestra Real Time de algo que me pareció sin dudas “fuertemente significativo”, vista en vivo aquella soleada mañana por canal 10 de Córdoba.
5. ¿Cuáles son los agrupamientos o tendencias que percibe en el arte argentino de los últimos diez o quince años a partir de elementos comunes?
Percibo y me llama la atención algo que no esta muy bueno y de lo que soy parte sin éxito, como también es tendencia: la tendencia a realizar obras o proyectos con vistas a premios y/o convocatorias. Es decir, tendencia a la adecuación rítmica de los incentivos y aparatos legitimantes y la producción bajo metas y objetivos externos al arte en sí mismo.
A nivel “estético”, noto el surgimiento de una tendencia “Miami”, con la cual no me identifico.